Los trabajos de restauración del mausoleo indio Taj Mahal, uno de los monumentos más visitados del mundo, para eliminar el tono amarillo provocado por la polución y que recupere el brillo de su mármol blanco llevarán nueve años.
El diario The Times of India recurrió a la ley de Transparencia para obtener información del Gobierno que revela que el Servicio Arqueológico de la India (ASI) necesitará casi una década en devolverle al monumento de la norteña ciudad de Agra su antiguo esplendor.
El ASI comenzó una nueva restauración del Taj Mahal el año pasado con una mascarilla de arcilla arenosa, basada en un cosmético tradicional que elimina manchas y que se aplica al mármol dejándolo secar durante una noche.
Además, el tratamiento de arcilla tendrá que repetirse cada 6 o 7 años para que la contaminación no afecte al monumento, según los datos que hoy difundió The Times of India.
Este tratamiento se aplicó en las restauraciones anteriores en 1994, 2001 y 2008, sin que el complejo tuviera que cerrar al público.
Las autoridades de Agra prohibieron a comienzos de año la quema de estiércol de vaca empleado como combustible para reducir la contaminación que amarillea el Taj Mahal.
La quema de este combustible tradicional se sanciona con una multa y las autoridades de la ciudad están promoviendo el empleo de gas, tanto en el uso doméstico como para vehículos.
Revestido de mármol blanco y piedras preciosas que cambian de color con el paso de las horas, el mausoleo fue levantado por 20.000 trabajadores durante 22 años (1631-53) como homenaje del emperador mogol Shah Jahan a su fallecida esposa favorita Mumtaz Mahal.
El monumento fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1983. EFE