El movimiento Hare Krishna ha estado tratando de construir un templo en Rusia desde 1990. Ellos todavía no tienen uno.
No es por falta de fondos. Desde que la adoración de Krishna fue legalizada en la Unión Soviética hace 26 años, el grupo ha tenido problemas para capitalizar este proyecto.
A pesar de un gran cantidad de seguidores locales, Rusia ha tardado en aceptar el Hare Krishna, ellos están dando casi periódicamente denuncias sobre violación de la libertad religiosa .”
El grupo se destaca por sus costumbres claramente foráneas, que revuelven la desconfianza de los muchos rusos conservadores y ortodoxos por naturaleza, dijo el experto en estudios religiosos Sergei Filatov.
“Ellos son demasiado brillantes y sensibles”, dijo Filatov, quien trabaja en el Instituto de Estudios Orientales de la Academia de Ciencias de Rusia.
Los devotos de Krishna dicen que la situación ha mejorado desde la época soviética, y sigue a mejorar. Sin embargo, el permiso de construcción más reciente para el templo fue revocado el año pasado y aún no se ha renovado.
Rock, Krishna y otros peligros
Aunque Krishna nació hace 5242 años, de acuerdo con los textos sagrados, la Sociedad Internacional para la Conciencia de Krishna sólo se fundó en 1966 en Nueva York.
El movimiento Hare Krishna comenzó a hacerse popular más allá de la cortina de hierro en 1971, cuando su fundador, Bhaktivedanta Swami Prabhupada viajó a Moscú a pesar de la militancia atea de la Unión Soviética .
Mientras que los funcionarios soviéticos estaban poco interesados en los movimientos religiosos, en este caso simplemente no entendían lo que estaba pasando: sobre Bhaktivedanta Swami, se creía que era un experto en estudios del hinduismo, cuando llegó” dijo Sanjeet Jha, un devoto de Krishna nacido en India, quien encabeza la Asociación de indios en Rusia.
fuente Moscow Times
