Conversamos con Ananta Sayana dasi, profesora de danza Odissi y devota del Krishna. Ella nos explicó en qué se inspira esta milenaria danza y cómo ésta puede potenciar la devoción por Dios, además de adelantar algo sobre el espectáculo que prepara para este sábado 29 de noviembre en el templo de ISKCON Chile.
¿De qué se tratará el evento de este sábado?
Este sábado vamos a realizar una presentación de danzas clásicas de India, en estilo Odissi y Bharatanatyam. Ambos son oriundos de India, el primero de la región de Odisha y el segundo del sur. Son dos estilos muy famosos y populares, son las danzas de India que más se estudian ahora alrededor del mundo.
En estilo Odissi van a participar 11 personas, en donde también bailarán niños. En Bharatanatyam bailará Karunamrita con su Escuela de 8 chicas, y finalmente Adriana Ananda también hará una presentación en ese estilo.
¿De dónde surge la Danza Odissi, que usted actualmente enseña?
El Odissi es muy relevante para la sociedad vaisnava (o Hare Krishna), ya que nació en el templo del Señor Jaganatha. Lo que hoy se consideran danzas clásicas, es lo que antiguamente se bailaba dentro de los templos como una ofrenda a las deidades. Habían sacerdotisas y músicos especializados en estas artes, y todo esto era ofrecido como parte de la adoración ya sea a Krishna o bien a devatas (semidioses ) como Shiva o Durga. Las sacerdotisas dentro del templo del Señor Jaganatha (un nombre de Dios que significa “El Señor del Universo”) eran conocidas como las maharis, y en el sur las de barathanatyam eran conocidas como deva dasis, sirvientas de Dios.
¿Cómo se popularizó en India y en el resto del mundo?
Con todas las invasiones que sufrió India y las influencias culturales que llegaron de afuera, esta casta de sacerdotisas se degradó. Con la independencia de India a mediados del siglo XX, resurgió toda la cultura de India, no sólo la danza sino la música, drama, y toda la riqueza artística del país. Al hablar de cultura en India, también hablamos de espiritualidad, ya que toda India está atravesada por la espiritualidad. En este resurgimiento, muchos eruditos y filósofos se dedicaron a buscar y rescatar las evidencias de esta danza, que está basada en escrituras.
¿En qué escrituras está basada esta danza?
La escritura es el Natya Sastra, escrito en sánscrito, y que consta de 6 mil versos en los que se narra detalladamente cómo se debe ejecutar la danza. El Natya Sastra está basado en el Natya Veda, en donde “Natya” significa, danza y “Veda”, conocimiento. Este Natya Veda tenía 36 mil versos, pero se transmitía solo de forma oral. Luego, no se sabe con exactitud pero alrededor de 200 años a.C, el gran sabio Bharata escribió el Natya Sastra, que es lo que hoy día tenemos como patrimonio y fuente de aprendizaje de esta danza.
Otra de las evidencias de esta danza son las esculturas en los templos. Por ejemplo, en el templo de Jaganatha Puri hay muchas esculturas talladas con pozes de danza, o en el templo de Konark en donde están los 108 karanas, que son las 108 poses más importantes de la danza Odissi. También quedaban unas pocas maharis o deva dasis, que ya no bailaban por su edad pero si pudieron ayudar a revivir este patrimonio, y que hoy se enseña a nivel universitario en la India.
En su caso personal, ¿qué la llevó a interesarse por este arte?
Primero, yo conocí Concienia de Krishna cuando tenía 16 o 17 años, por una hermana de mi padre que es una devota de Krishna. Paralelamente, siempre me gustó el baile y el arte. Mientras me introducía más en los conocimientos vaisnavas, busqué en disciplinas como el yoga artístico ligar la parte espiritual con la física, que a veces dejamos un poco de lado por estar buscando lo místico, lo intelectual de nuestra filosofía. Sin embargo, en nuestra constitución estamos dentro de un cuerpo, y tenemos que aprender cómo lidiar con él y ocuparlo armónicamente. Entonces descubrí esta danza, gracias a la señora Myrta Barbié, una bailarina muy renombrada del Teatro Colón en Argentina. En los años sesenta, ella estuvo cerca de 12 años estudiando en India las danzas clásicas junto a los grandes maestros. Luego estudié Bharatanatyam con la señora Leonora Bonetto, y posteriormente en India estudié el estilo Odissi en la Escuela Sangeet Parisad con la señora Laksmi Misra.
Este estilo me robó el corazón, por su relación con el vaisnavismo. Myrta Barbié tiene un libro en donde menciona a Ramananda Roy, asociado íntimo del señor Caitanya, como un experto música y bailarín de esta danza. Esta danza busca siempre crear un rasa, relación, entre la divinidad y el espectador y, como esta danza está inspirada en los pasatiempos de Radha y Krishna en el humor del Señor Jaganatha, es muy especial para el vaisnavismo.
¿Cómo fue su experiencia estudiando en India?
La Escuela era increíble; habían muchas niñas ya que la danza la empiezan a estudiar desde los 3 años y medio. En toda India, pero especialmente en Odisha, la gente es muy acogedora. Lo más maravilloso, es que todos son devotos del Señor Jaganatha, y su vida gira en torno a Él. No hay un día en que un habitante de Puri no pase al templo a dar reverencias al Señor, o que una moto rishaw (taxis de 3 ruedas de India) no cuelgue un remanente de la deidad. Es parte de la familia de las personas. Todas las calles principales de la ciudad desembocan en el templo. Otra cosa que me tocó el corazón es que ahí vivió el Señor Caitanya sus últimos años, realizando pasatiempos muy confidenciales. Recomiendo a todos los devotos que van a India visitar esta hermosa ciudad.
¿Habrán más clases para las personas que quieran practicar esta danza?
Si, en Chile estamos haciendo clases hace 2 años. El año que viene, a partir de abril, empezamos con cursos introductorios y seguimos con los cursos avanzados para las que ya están estudiando.